Calibración de básculas industriales paso a paso

 In Opinión

En esta nueva entrada de nuestro blog os vamos a contar brevemente cuáles son los trabajos y pruebas que realizamos en la calibración de una balanza o báscula industrial, en el campo voluntario de la calidad (calibración con certificado ENAC).

1. Prueba de espera.

Este es el primer paso que realizamos en Metropein para la calibración de básculas industriales. Se realiza en el lugar de la calibración, para conseguir la estabilidad térmica de la báscula o balanza y de las pesas patrón.

Es necesario, a excepción de las básculas mecánicas, en las electrónicas tener al menos durante treinta minutos conectada la báscula a la tensión de red. Así mismo, las pesas patrón deberán estar un tiempo de aclimatación en la zona de trabajo para evitar, en la medida de lo posible, la convección del aire.

2. Prueba de medición de temperatura y humedad

Como segundo trabajo procedemos a realizar las mediciones correspondientes con un termohigrómetro calibrado y con la resolución al menos de +/- 0,2ºC para la temperatura y de +/- 1% para la humedad. Estos datos son fundamentales para que podamos calcular la densidad del aire.

3. Prueba de excentricidad

Para la realización de esta prueba, se divide la superficie de trabajo en zonas iguales dependiendo del número de apoyos y se pone encima de cada una de esas partes, además del centro, una carga de aproximadamente un tercio de la carga máxima permitida para esa báscula.

El hecho de que esta prueba indique resultados diferentes al medir en cada parte de la plataforma nos da información de una posible avería que habría que solucionar antes de seguir con la calibración ya que estos resultados tienen una alta repercusión en el de la incertidumbre de medida.

4. Prueba de carga

Con esta prueba tratamos de ver la linealidad del instrumento y las diferencias respecto a los valores patrón de los puntos a medir. Hay que tomar al menos 5 valores: la pesada mínima, la pesada máxima y tres puntos más intercalados entre ambos.

Los valores se toman en carga y descarga, pudiendo repetirse estos mismos. De los valores obtenidos, podemos apreciar además de la linealidad, las diferencias respecto a patrones o lo que es lo mismo, los valores de corrección.

5. Prueba de repetibilidad

Esta prueba se realiza para comprobar que una misma carga, situada en un lugar diferente, nos da valores similares. Normalmente se suele realizar en dos puntos de la escala, como pueden ser el 25% y el 75% de la carga máxima permitida por la propia báscula.

Si estas lecturas no se repiten, es indicativo de que la báscula tiene problemas de excentricidad o deriva.

6. Emisión del certificado ENAC

El último paso que daremos en el campo voluntario de la calidad es la emisión del certificado ENAC. Lo hacemos con los correspondientes cálculos de errores y de incertidumbre de medida de la báscula o balanza industrial.

En próximos artículos hablaremos sobre cómo interpretar la incertidumbres que aparecen en un certificado. ¡Permaneced atentos!

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